una creación de EMILIO HERNÁNDEZ
originalmente el encargo de esta micropieza disparó la idea de una improvisación percusiva en conjunto con el canto de las ranas de una laguna.
participo en lemu, un trío junto a dos bailarinas, donde mayormente trabajamos con danza vertical en entornos naturales con las cuerdas ancladas en grandes coihues. suele suceder que en medio de nuestros movimientos y sonidos hay reacciones inesperadas por parte de algunas aves o una brisa se acopla agitando las ramas o el sotobosque justo en un momento de éxtasis.
es bien conocido que aves de mar y delfines, entre otros, acompañan a los navegantes en sus travesías oceánicas, muchas veces alertando sobre peligros, cambios de rumbo o tormentas que se avecinan.
me gusta pensar que hay una música inherente a los seres de esta tierra
y produce interrelaciones… aunque no podamos comprenderla.
esto nos interpela sobre lo que entendemos por música y el bagaje que de ella cargamos…
¿es acaso el sonido, la música, patrimonio de una escuela puertas adentro?
ya el siglo pasado se encargó de indagar, aunque más no sea para algunos de los mortales, sobre relaciones tonales, armonías y esquemas rítmicos que han mantenido a la música bajo las cuerdas durante mucha parte de la historia…
tenía grabaciones de campo de ranas de la laguna de última esperanza, un brazo del lago Nahuel Huapi, pero realmente no me interesaba trabajar sobre un sonido previo sino establecer un contacto fluido con estos anfibios verdes improvisando con algún tambor preparado. en su lugar encontré tres caballos metidos de cuerpo entero y masticando las totoras que asoman sobre el agua cerca de la costa. la eclosión pareció no llegar nunca…
luego de una tormenta de nieve de tres días preparé dos mochilas con equipos y mi cítara eléctrica, sin un plan previo, fui a buscar el lugar que resonara en el oído… vivo en una población rural rodeada de lagos y ríos, dos de ellos se juntan a unos 300 metros de mi casa. El Totoral es el río que une ese lago con el Nahuel y el Cau Cau en un río de montaña que en esta época del año viene muy cargado. me establecí en un lugar donde dos cañas estaban haciendo redobles a causa de la corriente. alrededor de tres horas estuve tocando con diversos materiales…
decido solo hacer un intento mas cuando al fin sucede…
un pequeño grupo de pájaros responde a la cítara.
¡Mirá el video de la performance AQUÍ!
Emilio Hernández - Él
Porteño de nacimiento, hace 20 años vivo a orillas del lago nahuel huapi. Soy músico y navegante. Baterista y percusionista de diversas tradiciones, también incursiono en los formatos experimentales y de improvisación libre interdisciplinaria, muchas veces con instrumentos que diseño y construyo.
https://bandcamp.com/haciaelocaso
IG: @haciaelocaso
