huerta y coreografía
Alina Marinelli y Magma Centro de Artes
Hacer una huerta como una práctica de cuerpos.
El aire suspende las invitaciones, mientras que el tiempo las anima a materializarse.
La experiencia de desocupar intermitentemente la verticalidad para organizarse distinto.
Otras formas, otras escalas. Otros pliegues.
Estar en cuclillas, sentir los dedos de los pies apretandose y los talones volando
El peso se hace presente, la dirección hacia abajo se hace presente,
las ganas de apoyarse y dejarse sostener se hacen presente.
Empezar a tocar el espacio con otras partes.
Cambiar. Mover . Volver a cambiar y seguir moviendo.
Notar que las distancias se vuelven otras.
El suelo y los extremos se acercan. Las texturas y las diferencias también se acercan.
La mirada cenital se ensancha, el punto de vista se multiplica.
Los ojos se desparraman por el resto del cuerpo.
El estado es de cierta confusión y la experiencia se vuelve macro.
Las sensaciones se intensifican, las placenteras y las no tanto.
La falta de costumbre y lo que está más cerca de lo que pensamos.
Se vuelve una experiencia de tejidos, pieles, huesos, carne.
Humedades, espacialidades y tiempo.
Se exacerba la intuición.
Aflora un cuerpo más ambiguo, más par, más compañero.
Un cuerpo poesía.
Imágenes que comienzan a filtrarse en ese hacer.
Formas y posiciones que evocan lo animal, lo arcaico.
Un hacer casi sin mediación alguna.
Un contacto CuerpoaCuerpo absoluto y otra vez las manos en foco.
Todo el cuerpo a través de las manos.
Unas manos pura intuición, pura imaginación, pura intención.
Todo el cuerpo a través de unas manos que pueden hacer lo que hace falta.
Tocar, rozar, mover, hacer espacio.
Sostener, limpiar, cortar, dar dirección.
Separar, arrancar, cavar, generar cercanías.
Hundir, diseminar, esparcir, dar protección.
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Alina Marinelli - ella - https://cargocollective.com/
colaboradora
Nací en Buenos Aires. Me dedico a la danza, la performance y la relación entre los cuerpos y el movimiento. Me interesan los cruces, lo híbrido, las colaboraciones y lo colectivo. Pienso la práctica coreográfica, como una práctica que se expande y atraviesa todo tipo de cuerpos (humanxs y no humanxs). Formo parte de los colectivos Escena Política y Foro de Danza en Acción.
